Creo conveniente aclarar estos conceptos que se confunden en el acervo popular. Si usted sale con su mujer o marido, con unos amigos o amigas, va acompañado de su perro o con los niños, y recorre un paraje hermoso, véase parque o camino forestal, aunque usted vaya ataviado con chándal y zapatillas deportivas, una cinta en la cabeza y otra en la muñeca, sabrá, no porque yo se lo diga sino porque usted mismo se dará cuenta al volver a casa que ni ha sudado (salvo olas de calor), que usted ha practicado un rato de vida saludable , bueno también para las relaciones sociales, pero ejercicio, lo que se entiende por ejercicio no ha hecho. Para esto último tiene que salir a caminar deprisa, ir al monte, correr, sacar una bici y subir un puerto, etcétera, y notará que está haciendo ejercicio porque respira con dificultad, suda y le duelen los músculos. Y, finalmente, si usted se junta con los amigos en la sala de su casa o en el bar, con tres botellas de rioja o veinticuatro latas de cer
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